viajar...

“Pero viajar no es un empeño en busca de lo imaginado, no es la persecución de algo que uno quiere ver, cerrando los ojos a todo lo demás. No es un deporte hecho para los que están seguros de lo que son, qué quieren y adónde van. Una sola pregunta puede justificar un gran viaje y el viaje está hecho para aquellos que no saben muy bien hacia dónde se dirigen ni conocen con exactitud lo que buscan. Está hecho para los que intuyen que encontrar no es lo importante y que cumplir un sueño puede ser, sobretodo, darse de bruces con la aventura. Es cierto que regresamos siempre, pero no debe viajarse con la intención de hacerlo. Viajar tiene algo de nacimiento"

Javier Reverte.
El Sueño de África.

19 fevereiro 2008

DOS GAMBAS MUY GAMBAS EN CALIFORNIA

Sin duda alguna, si hay algo que tengo que resaltar en lo que llevamos de viaje es nuestra buena mano en esto del arte de la improvisación, por llamarlo de alguna manera. Conseguir que ninguno de nuestros planes se lleven a cabo tal cual los planeamos en un primer momento es algo que todavía no deja de sorprendernos y maravillarnos. Y la verdad, nos gusta. Poner rumbo a un barrio y terminar en otro es algo que está empezando a ser normal en nuestro día a día. Planear un maravilloso día de bici y terminar comprando plantillas de silicona en el barrio de Castro es algo que ya no nos sorprende, incluso nos agrada. Y es que ¿para qué ir hoy si podemos ir mañana? Peligro, peligro. Así nos pasa que vamos a comprar un billete de autobús y nos tiramos dos horas desternilladas de la risa en la sala de espera… con los billetes ya comprados. Pero bueno, la mejor de todas las improvisaciones, la madre de todas nuestras desviaciones, la que más orgullosas nos hace sentir es, sin lugar a duda, la que nos marcamos el domingo pasado. Esta es la historia de cómo pusimos rumbo a Sacramento y terminamos en el pueblito perdido de Roseville.
Amanecimos un bonito dia de domingo a eso de las seis de la mañana dirección Sacramento, un pueblo localizado a tres sencillas horas de San Francisco. No podía ser sino una preciosa furgoneta la que hiciera que madrugásemos de tal manera, con gracia, simpatía e ilusión. La ruta era simple: coger un autobús hasta Emeryville y allí un tren dirección Sacramento. Muy fácil. Llegamos a Sacramento en no sabemos muy bien cuántas horas, pero extrañamente una hora antes de lo planeado, hora durante la cual disfrutamos de las maravillas que Sacramento nos ofrecía, entre otras, una guitarra giratoria gigante del Hard Rock Café, dos maderos arrastrando a un tipo esposado con los vaqueros del revés y a una tierna abuelita que empujaba un carrito ocupado por una pequeña perrita que miraba curiosa todo aquello que le rodeaba. Una vez llegada la hora punta, llamamos al dueño de la furgo para que nos diera un par de indicaciones sobre donde se localizaba su concesionario. Sí, sí, su concesionario… “Riverside esquina con 5th Street”, nos dijo. “Hecho, para allá que vamos” Nos plantamos frente a un mapa y Riverside no aparecía por ningun lado. “¡Ah, mira, la 5th street! Nos la bajamos del tirón y en algún momento tendrá que cruzar Riverside Street” Muy bien, muy listas. Comenzamos a bajar la 5th street y las calles que nos cruzamos fueron las siguentes: J, K, L, M, N, O, P, Q, R, S, T, U, V, X… Tras cruzarnos Barrio Sésamo de la A a la Z, ilusas de nosotras, creimos que aparecería Riveside ¡pero no! Para nuestra agotada e ingenua sorpresa empezaron a aparecer números. Llegadas a este punto, bajo un sol de infierno, sin aparente vida a un kilómetro a la redonda, con los sueños de esa maravillosa furgoneta desvaneciendose a cada metro caminado, vimos a un camionero y no dudamos en preguntar por la fantasmal calle de Riverside. El camionero sacó sus gafas, sacó su mapa y dijo que en su plano esa calle no aparecía, pero que al principio de la calle que acabábamos de trillarnos, si cruzábamos el puente, allí habían un montón de calles con la palabra River.

Dimos la vuelta: X, V, U, T, S, R, Q, P, O, N, M, L, K, J… y por fin, el famoso puente. Brillante idea la de Ainhoa de preguntar antes de cruzar: “Riverside ahí no está” nos dijo un tipo, “Está al final de la 5th Street”. Me voy a ahorrar lo que supuso escuchar esto, y me voy a ahorrar el repaso al abecedario. Volvimos a patearnos la 5th street y ahí, al final de la calle, Riverside no existía. Aparecimos en un barrio de casas blancas de porches blancos, césped recién cortado, rancheras aparcadas a la puerta de las casas y dimos con un tipo que nos dijo que Riverside estaba a una milla y media de donde estábamos. Se negó a acercarnos, no se si ya por la pinta de demacradas o porque simplemente era un soplapollas, pero ante eso, mi compañera y yo nos arrastramos rumbo a ninguna parte por los jardines de la solitaria urbanización hasta que finalmente dimos con Ty.
Ty estaba apaciblemente en su jardín regando sus plantas y limpiando su coche, preparándose para ir a echarse unas bolas al golf, cuando le pillamos y le rogamos ayuda. Tras un primer contacto cedió y nos dijo que nos acercaba, pero antes iba a confirmar en Internet la dirección. Confundidas y derrotadas nos dejamos caer en su precioso césped recién cortado. Salió y nos dijo solemne “No la encuentro”. No entendíamos nada, pero nada de nada. Le convencimos para que llamara y el teléfono simplemente no existía “Pero si yo he llamado miles de veces…” le dije, y entonces me dijo que el prefijo que teníamos apuntado no era de Sacramento. Marcó el prefijo, y lo peor, lo peor que podía pasar, ocurrió. Nos habíamos confundido de ciudad. Estábamos a 40km de nuestro destino.
Voy a intentar, de verdad, hacer la historia corta. Ty llamó de nuevo al tipo del concesionario que tenía nuestra candidata a “Miss VW ‘07 tirada de precio” y le preguntó, para nuestra sorpresa, si podía venir alguien a buscarnos. Para más sorpresa todavía, le dijeron que sí. Algo menos de una hora después apareció por allí Patric en su Lantus negro de asientos forrados de-pelo-de-oso-color-rosa y The Pinguins a todo trapo. Nos llevó hasta su concesionario a 550km por hora por una autovía dirección Reno, peinándonos el pelo con el bajo techo de su Lantus, Ainhoa sentada detrás acompañada por un correcaminos de peluche que tenía el cinturón de seguridad abrochado. Durante el viaje, que a tal velocidad digamos que fue ‘rápido’, Patric de repente nos preguntó cómo pensábamos pagar el Lincon. Con sus más de setenta años encima todavía pudimos ver como le fue cambiando el color de la cara cuando descubrió que estábamos interesadas no en ese preciado y nuevo Lincon del que nos hablaba, sino en la abandonada y mal cuidada Vanagon de la esquina de su concesionario.
Llegamos a su concesionario y la cosa fue rápida. La furgoneta era una mierda. Una vez aclarado esto, volver a casa era nuestra principal preocupación. Nos pateamos una milla y media en busca de una estación de autobús/tren - que a estas alturas del día dudábamos de su existencia - parando para comer en el único restaurante con vida (en el sentido literal de la palabra) de la zona, que resultó ser un mejicano en el que servían burritos rellenos de carne, arroz, judías, ensalada y salsa de yogur, todo junto envuelto en un pan de pita tamaño XXL (burrito que sabiamente Ainhoa bautizó como ‘burrada’). Encontramos la estación, la taquilla cerrada y como única esperanza un horario de autobuses mal colgado. Dos horas más tarde apareció un autobús rumbo a San francisco con un amable conductor que nos gritó que nos sentáramos de una puñetera vez y que pagásemos el viaje en la parada de Sacramento. Ya lejos de Roseville, en la cola de las taquillas de Sacramento y poco dispuestas a pagar nuestro viaje desde Roseville y el consiguiente viaje a SF en un infernal autobús, una simple mirada entre Ainhoa y yo bastó para saber que lo propio era echar a correr y salir por patas de la estación. Por patas que salimos de ahí, atravesando las dos puertas traseras de la estación como dos fugitivas perseguidas por la INTERPOL o, más bien, como si acabáramos de robar dos chupa-chups en el kiosco de la esquina, y para nuestra sorpresa, la gigante guitarra giratoria del Hard Rock nos esperaba al otro lado indicándonos nuestra localización. Corrimos hasta la primera esquina, Ainhoa cual lince y yo detrás, arrastrada desternillada de la risa, con la tranquilidad de saber que nuestra estación de tren estaba a la vuelta de la siguiente esquina.
No sabemos muy bien cómo, y casi sin poder creerlo, a media noche estábamos entrando en nuestro hogareño Hostal Internacional de SF. Hogar dulce hogar…






12 comentários:

Anônimo disse...

Pequeñaja veo que la primera semana ha sido muy estimulante, es el entrenamiento, que envidia. Pero mas envidia me va a dar el buceo de Yucatán. En dos semanas tu madre y yo en Paraty ...buceando? pero te echaré de menos
Besos a las dos Ppn

Unknown disse...

anteojos?? que sorpresa...

Anônimo disse...

Que bonita estas con las gafitas!

Ppn

Anônimo disse...

Hola Martita soy "hola Papa Noel" me has dado un alegria con la furgo, puedes contarme o contarnos a todos un poco sobre ella, al final va a ser un poco parte de la familia. Unas fotos en el blog, por fuera y por dentro y alguna de las caracteristicas tecnicas seran bienvenidas. Bueno niñas me gustan mucho las historias que nos contais. Un besazo muy fuerte a las dos de Ppn, el de la Harley

Anônimo disse...

martita, guapa, requeteguapa.

a.w.w. (tambuzi)

Anônimo disse...

News del otro lado del charco
----------------------
El sexo sigue en alza! Ahora nuestra vicepresidenta Fdz de la Vega hace declaraciones en Magazine de que no es homosexual, que es un invento de la prensa contraria al régimen! (esto último me lo he inventado)...y a mi que me gustaba así ...nif nif
A McCain le han pillado un heterosexo 31 años mas joven, que le va a joder la nominacion, los de por ahí siempre igual. A un funcionario de prisiones en Palma le pillan haciendole un chupa chus a un preso colombiano ...
El debate Pizarro vs Solves en tablas y ahora viene el del cejas y el barbas (como les llaman por aqui haciendo signos), va a ser patético .. el quién da mas..give me a break!please!
Escandalo de fraude fiscal , traslado de fondos a paraiso fiscal de top people alemán, los turcos golpean a los kurdos en Irak, el Presi sigue de disfrute con la Bruni mientras la economia francesa se marchita ...la Europa retrógada ...
Yo anarquista ya lo dije ..
Y mientras tanto las viajeras en SF! os aconsejo de que bajeis unas millas en la furgo a LA a ver el glamour de los Oscar y nos mandeis unas fotillos de algun/na famoso/a, mucho mejor que los lacónicos personajes de por aquí

Escribe:
La vaquera de la Finojosa

Anônimo disse...

Hola gupas!! ya soy un fiel de vuestras aventuras,esto si es un viaje de 2 campeonas al volante de la furgo de los sueños de todos los k lo vivimos desde aki...
Pollo.Tenerife.

Unknown disse...

Ppn, por supuesto que te identifico. ¿Quién sino me iba a llamar 'pequeñaja' con mis casi 26 años? Me chiflan tus mensajitos, eres más chulo que un ocho. Eso de 'ppn, el de la harley' ha sido de órdago ;D Te quiero!

Vaquera, me tienes frita. Pienso en ti y es como jugar al 1,2,3 responda otra vez. Aun así, ahora que tenemos furgo, dale caña al caballo o te alcanzo. Eso sí, por dios, no dejes de dar noticias. Qué disgusto lo de la Vega...

a.w.w. te untaba a gusto en un bagel californiano.

Anônimo disse...

Esa familia canaria!!!!!Que alegria saber que seguis nuestras aventuras...Dale un abrazo enorme a tod@s.Pollo no sabes la ilusión que nos hace que nos escribas y nos sigas tan de cerca. Espero que estes ahorrando para venir a nuestra furgo este veranito. Una sonrisa enorme desde el Yanky.
muaak

Anônimo disse...

Marta, Ainho, seguirán las "news del otro lado del charco". Os revelaré el nombre que esconde el pseudónimo solo cuando el viaje termine, sinó me pillais antes...there are some small clues in the news ...

"Faciendo la vía
del Calatraveño
a Santa María,
vencido del sueño,
por tierra fragosa
perdí la carrera,
do vi la vaquera
de la Finojosa"

Escribe:
La vaquera de la Finojosa

Unknown disse...

Anarquista de habla inglesa? Esa fragancia de somosaguas junto con ese acento escocés...

Anônimo disse...

Hola pequeñaja, especialmente estos dias nos acordamos mucho de ti. Ultimamente escribes poco y estamos todos vuestros fans ansiosos de ver vuestra nueva casa sobre ruedas. Una foto...Cuando pensais ir hacia el Sur? Ya he cancelado tu billete de vuelta. Cuando te estabilices consigue un movil del pais para que te podamos llamar. Muchos besos de tu papin, y otro tambien para Ainho, cuidaros.